Durante el mes de noviembre se han finalizado las obras en el Castillo de La Vilavella, que han permitido realizar excavaciones arqueológicas, mejorar la iluminación exterior y poner en valor la fortaleza. Las obras han sido realizadas por la empresa ARCOIBERICA S.A., siguiendo las directrices del proyecto redactado por el despacho de Ingeniería y Arquitectura, especializada en Patrimonio, de Castellón ATG Enginyers S.L.P., que también ha llevado a cabo la Dirección de Obra y Coordinación de Seguridad y Salud.
Las obras se han realizado gracias a la subvención de la Presidencia de la Generalitat, sobre las ayudas destinadas a financiar actuaciones para promover la protección, el fomento y el desarrollo del patrimonio y la dinamización cultural, y la adecuación y la renovación de bienes y espacios municipales de la Comunidad Valenciana, convocadas por la Resolución de 21 de mayo de 2024, de la Presidencia de la Generalitat, que en el caso de La Vilavella han ascendido a un total de 149.320,05 €.
Los restos actuales del castillo, declarado bien de interés cultural (BIC), son el resultado de la evolución de sus espacios y estructuras a lo largo de siglos de ocupación, situando previsiblemente su origen en época neolítica. Ya existe constancia de actividad por restos cerámicos en la Edad del Bronce y posteriormente como asentamiento Ibérico. Más tarde fue ocupado en la época Islámica donde probablemente se constituyera el núcleo primigenio de la fortaleza en época califal.
Gran parte de las estructuras que actualmente conforman el castillo pertenecen a su época medieval de dominación cristiana, entre los siglos XIII y XIV, cuando es ampliado hasta alcanzar el trazado definitivo, tras su conquista por parte de Jaime I en 1238. En el año 1250 pasó a manos de la familia Montcada y posteriormente a los Centelles. A partir del siglo XV, comenzará una fase de abandono del conjunto monumental que acrecentaría la decadencia de su arquitectura, una vez perdida su función defensiva y de residencia de los señores.
La ubicación de este castillo ofrece unas vistas únicas de La Vilavella y los alrededores, pudiéndose ver la localidad de Nules o incluso divisar el mar y abarca una superficie de 7.000 metros cuadrados aproximadamente.
EQUIPO TÉCNICO ATG ENGINYERS SLP:
Adela Ferrando Ortiz (Arquitecta, Máster Universitario en Conservación de Patrimonio)
Raquel Rambla Moliner (Arquitecta técnica, Máster Universitario en Conservación de Patrimonio)
Sara Ulldemolins Farah (Arquitecta técnica)
Patricia Gallego Castillo (Arquitecta técnica)
Vanesa Señoret Molina (Doctora en Biología)
Sergio Casero Palomares (Ingeniero Civil, Máster Universitario en Prevención de Riesgos Laborales)
Clara Melendez Nuñez (Arquitecta técnica)
Sergio Alarcón Gual (Ingeniero Agrónomo)
Pablo Altaba Tena (Arquitecto técnico, Máster Universitario en Conservación de Patrimonio, Doctor en Arquitectura, Edificación, Urbanística y Paisaje)
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